Ciudad de México, 23 de octubre (SinEmbargo).– La bebé de la mujer que fue asesinada por su esposo en Guanajuato, a pesar de que tres veces denunció ante las autoridades que era víctima de maltrato en su hogar, sigue desaparecida. Las autoridades temen que sea sacada de la entidad por la familia del homicida confeso.
En días pasado se activó la Alerta Amber para localizar a la menor de cinco meses, hija de la fallecida Laura Patricia Vázquez. El Procurador de Justicia en Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre, que es cuestionado por negligencia en este y otros casos que vinculan a mujeres, recurrió a las redes sociales para intensificar la búsqueda.
A través de su cuenta en Twitter, dijo que se llevan a cabo una serie de acciones para dar con el paradero de la menor Ivana Geraldin Castro Vázquez con base a la solicitud de medidas cautelares a la autoridad jurisdiccional (ya emitida), para evitar que sea sacada de la entidad/.
Se busca que una autoridad de asistencia se haga cargo de su custodia. La madre del detenido, en teoría, la tiene.
El Procurador dijo que se encuentra a disposición de la población la línea telefónica 01 800 DNUNCIA (36-86-242) para cualquier información que pudiera contribuir con la búsqueda.
Geraldina Aguilar Castro, abuela de la niña y madre de la mujer asesinada, denunció ante el Ministerio Público la desaparición de su nieta, pero no obtuvo respuesta a tiempo.
La señora Aguilar Castro denunció el 14 de octubre pasado que las autoridades la ignoraron aún cuando su negligencia ya provocó una muerte: la de su hija. Narró que a los 40 días de nacida, la pequeña fue arrebatada por el homicida confeso, Miguel Ángel Concha Rocha, de las manos de su madre. Esto llevó a Laura Patricia a acudir varias veces al Ministerio Público, que la ignoró. Ahora, la madre está muerta y la niña desaparecida.
“El señor le quitó a su bebé cuando apenas la nena tenía 40 días de nacida y ella aún la estaba amamantando. Le fue arrebatada de sus brazos con golpes, con violencia”, dijo la abuela.
Cuando aún vivía, Laura fue al Ministerio Público acompañada de su madre; denunció violencia intrafamiliar y el robo de su hija. Pero las autoridades las ignoraron. El esposo se decía agente de seguridad pública.
Poco después, Laura Patricia murió estrangulada a manos del marido; eso fue el pasado 21 de septiembre, en la colonia Villas de Nuestra Señora de la Luz de Guanajuato.
“Desde los 40 días la tiene la abuela paterna. Yo desde entonces no he visto a mi nieta. A mi hija se la dejaron ver creo que en dos ocasiones nada más a cambio de leche, pañales, cigarros, dinero en efectivo. Entonces son cinco meses los que he esperado y he esperado a que las autoridades me digan: ‘aquí está la niña’”.
Laura estaba peleando que le regresaran a su niña, “pero en lugar de niña, tuvo una muerte muy trágica”, señaló Geraldina Aguilar.
EL ASESINATO
El pasado 10 de octubre se dio a conocer que la inoperancia en los protocolos de género del Ministerio Público de León, Guanajuato, derivaron en el feminicidio de Laura Patricia Vázquez Aguilar a manos de su esposo, Miguel Ángel Castro Rocha, a pesar de que acudió en tres ocasiones en el Ministerio Público para denunciar que sufría violencia intrafamiliar.
El crimen se cometió a finales de septiembre pasado, aunque la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) lo hizo público apenas el 1 de octubre, cuando logró el arresto del presunto asesino.
Este caso se suma a decenas ya documentados por organizaciones civiles y defensoras de derechos humanos en Guanajuato. La sociedad de leonesa, en particular, mostró su indignación por este nuevo caso que apunta a un nuevo acto de negligencia de las autoridades, afirmaron activistas locales.
El más reciente, el de la joven Lucero, quien denunció el ataque físico y sicológico del que fue víctima por parte de un desconocido y la doble victimización que sufrió por parte de las autoridades de justicia de la entidad, acaparó incluso la atención nacional y llevó a la Diputada guanajuatense Malú Micher a denunciar en la tribuna de la Cámara Baja a la administración del Gobernador panista, Miguel Márquez Márquez, como uno que ha mostrado “total desprecio” por las mujeres en el estado.